Instructores de vivencias en positivo
Marta García Valenzuela tiene una faceta de madre que es eterna: a sus dos hijos, hay que sumarle que acoge a niños japoneses que vienen a jugar a fútbol y adopta perros para niños autistas. Por otro lado, se encarga de trabajar para el liderazgo y la inclusión de la diversidad para altos ejecutivos. Ha escrito un libro: “Héroes de la diversidad”.
Ahora más que nunca, mientras atravesamos un tiempo de tanta turbulencia, incertidumbre y ambigüedad; y en la que los líderes antiguos no saben a qué aferrarse para tomar buenas decisiones, se necesita de la inteligencia colectiva: la suma del talento de todas las personas.
En este panorama es imprescindible ejercer un liderazgo inclusivo: un liderazgo que aproveche la diversidad que está presente en todas las personas, y la transforme en un valor.
Es un ejercicio de pasar de la incompetencia inconsciente (no saber que no sabes algo) hasta la competencia inconsciente. Para llegar hasta ahí hay que darse cuenta de que lo que se viene haciendo hasta ahora no funciona y que hay que cambiarlo.
Una de esas realidades es que nos cuesta mucho trabajar con la diferencia. Y no es debido a ningún prejuicio hostil sino porque nuestra naturaleza lleva implícita el sentirse cómodo trabajando con personas similares.
Todas las personas, y en todos los lugares del mundo se da este sesgo hacia la diferencia.
Uno de los problemas más frecuentes con la diversidad es que, en muchas ocasiones, se nos vende una imagen muy “naive” de ella. Sin embargo, la realidad es que trabajar con la diversidad es muy complicado y genera mucha tensión.
La mirada propia se complementa mejor y se ve más enriquecida cuando se le suma la de aquel que más diferente parece.
El mundo puede ser visto bajo muchas miradas diferentes pero necesarias. Por eso, cuando se debe tomar una decisión que afecta a muchos, no se puede dejar atrás ninguna de estas miradas diversas.
En las dinámicas de equipos, una persona sola termina asimilándose al equipo en una lucha entre el mostrar la singularidad y la pertenencia; por eso es tan importante que exista una representación suficiente de dicha diversidad en los equipos.
Tenemos que dejar de trabajar liderazgos que se centran en sí mismos, egocéntricos, para pasar a trabajar en liderazgos que piensen en los demás y que gestionen tendiendo puentes.
Los líderes de antaño eran poco menos que semidioses que se echaban el mundo a sus espaldas sin mostrar ningún tipo de vulnerabilidad. Hoy en día, se necesita más empatía y compasión para liderar en el mundo que habitamos.
Necesitamos líderes que compartan su liderazgo; que no se encuentren ni delante ni detrás de los equipos, sino que caminen al lado creando otros líderes.
Por estos motivos, es muy importante que los líderes de hoy y de mañana tengan hecho un buen trabajo de desarrollo personal. Un ejercicio de responsabilidad que exige conocer las fortalezas y energías propias antes de ponerlas al servicio de los demás.
El autoliderazgo es imprescindible para poder luego ejercer un buen liderazgo en un equipo. Y, para ello, los líderes deben entender su propia diversidad: para que un liderazgo deje de ser simpático y pase a ser empático.
Nunca es demasiado pronto para formar a un líder. La educación es la única herramienta que tenemos para cambiar el mundo. No sólo en centros educativos, sino que los valores educativos deberían estar alineados en todos y cada uno de los ámbitos de la sociedad.
Un liderazgo debe de ser de calidad y útil para
conseguir una mejora en la vida de las personas.
Uno de los factores que anulan la diversidad es la urgencia y, desgraciadamente, hoy vivimos en un mundo lleno de estrés y de urgencias.
Y deberíamos de hacernos la siguiente reflexión: si nuestra vida nos parece cómoda, puede que no nos estemos relacionando bien con la diversidad.
Todo el mundo posee diversidad. Es la suma de identidades que nos hacen personas únicas y singulares.
Saca a relucir tu diversidad y apúntate a este café.
Será un placer acompañarte desde la Tribu “INVIVEN”. Recuerda que, si no quieres conformarte con las migajas, puedes matricularte en la formación online “INVIVEN “(Instructores de Vivencias en Positivo) que cuenta con el aval de la Universidad Europea Miguel de Cervantes.
Muchísimas gracias por estar ahí. Si te ha gustado, me encantará que des al “me gusta” y que te suscribas al canal para que no te pierdas ninguna novedad.
Muchas gracias por compartir y recomendar este podcast y nuestras formaciones a todos aquellos a quienes creas que puede ayudarles. Ya sabes que puedes encontrarlas todas ellas en la nueva Academia online «Rosa Montaña».
No olvides que puedes encontrarme en www.rosamontana.com o en rosa@rosamontana.com
También en el podcast “Lo que siempre quisiste saber”, donde hablamos de sexo y de relaciones de pareja sin pelos en la lengua.
Muchas gracias.