Inviven

Seguro que en alguna ocasión has tenido la sensación de no poder más y estar en un estado de agotamiento total. Vamos, con la barra de energía rozando el cero.

AGOTAMIENTO EXTREMO

No nos damos cuenta de que no siempre es fácil volver a cargar la batería por completo. 

Hay ocasiones que, debido a tener que estar tirando demasiado del carro, nos colocamos en una situación de vulnerabilidad por agotamiento.

Debemos aprender a hacer cosas con la batería baja sin remordimientos ni culpas. Porque habrá ocasiones en las que, aún estando así, seremos capaces de tirar hacia delante.

Quizás no a la misma velocidad y con el mismo brío; pero podremos seguir avanzando.

ESE FINO HILO DE ENERGÍA

Por eso sabemos que, cuando nos tengamos que enfrentarnos a situaciones muy complicadas y tengamos la tentación de tirar la toalla, daremos un paso al frente. 

Aun en situaciones de agotamiento máximo, puedes encontrar un fino hilo de energía al que agarrarte para seguir adelante y dar un poco más.

Eso es a lo que se le llama excelencia. A seguir adelante cuando tu cerebro te está informando del agotamiento extremo de cada músculo y neurona.

Recuerda que eres tú, y sólo tú, quien puedes buscar tu propia excelencia. Nadie más.

MEJOR HECHO QUE PERFECTO

Debemos darnos el permiso de no ser siempre perfectos y de aprender a decir que no, luchando contra la procrastinación.

La vida sigue y no merece la pena que estemos recriminándonos continuamente el hecho de no haber alcanzado la perfección. 

Está bien que des lo que puedas, desde tu excelencia.

Recuerda que mañana tendremos otro nuevo día: un lienzo en blanco entero; una nueva oportunidad de seguir mejorando.

Esa es una de las características que mejor define lo que supone ser un MEDECs: un mortal excepcional con derecho a cagarla muchas veces. 

Y tú también eres MEDECs.