Inviven

No voy a descubrirte hoy la rueda como si fuera un invento actual; muchos filósofos han reflexionado durante milenios en torno a los misterios de la vida y seguro que lo han hecho mucho mejor de lo que pueda hacer nunca yo.

POSICIONARSE EN LA VIDA

Sí quiero, a través del episodio de hoy, que te des cuenta de tu posicionamiento en la vida. No para adquirir un conocimiento completo de lo que significa, pero sí para saber qué actitud tener ante ella.

Lo vamos a ver desde tres puntos de vista distintos: el “tú”, el “yo” y la sociedad en general?

MODELAJE

¿Cómo posicionarnos ante los demás?

La forma, quizás, más recomendable consiste en el modelaje del otro: “me encanta cómo te posicionas en la vida y cómo es tu energía; no sólo me gusta sino que te uso como modelo”. No hablo de hacer una copia barata; hablo de modelaje auténtico, desde un respeto supremo y sin renunciar a mis características propias como persona única e irrepetible.

Cuando te planteas cómo posicionarte en la vida, sueles asistir a una auténtica batalla que se libra en tu interior entre creencias de antes y nuevas creencias para dilucidar quién se queda y quién se va.

Puede que pienses que tú no tienes de esas creencias limitantes pero no es así: aunque no puedas verlas, están ahí y, con un poco de positivismo, podrías expulsarlas para que nuevas creencias ocupen el hueco libre.

SUPERIORIDAD, “YO YA”, INDIFERENCIA Y “POR SUPUESTO”

Otra postura distinta es la de la superioridad: “yo sé más que tú y te digo lo que tienes que hacer por tu bien y porque te quiero”. ¿Perdona?

No utilices tu incapacidad para transformar lo que yo hago. No te voy a permitir que me descalifiques ni una sóla vez. 

El “yoyaísmo” es una creencia que ancla a la persona impidiéndola crecer. Fíjate las veces que lo dices porque quizás te sorprendas.

Luego está el “no sé” de la indiferencia más absoluta. Se piensan que son felices pero, en el fondo, lo más seguro es que tampoco lo sepan. 

El borreguismo adoctrinado termina saliendo demasiado caro para los que lo practican, dejando que sus decisiones sean tomadas por terceros. 

Para vencer esa indiferencia sólo se puede dar un paso al frente y pasar a la acción. Y ya estás tardando.

Por último tenemos el “por supuesto” de los que se apuntan a cualquier locura que se les propone. Y, aunque en algún momento les llega algún atisbo de duda ante la misión, ellos siguen adelante, convencidos de que es lo mejor.

LA REALIDAD Y LA SOCIEDAD

Nos queda hablar del punto de vista de la sociedad.

La realidad siempre va a resultar subjetiva y siempre van a existir los puntos de vista. Y siempre conviene tener en cuenta los puntos de vista de los demás y no cerrarnos en el nuestro propio.

Pero luego está el tema de lo que la sociedad se empeña en dictarnos en todos los ámbitos posibles. Si cumples con lo que dicen, palmadita en la espalda; y si no lo haces, entonces empiezan las descalificaciones y la culpa.

Decide si quieres pensar y actuar por ti mism@ independientemente de que te aplaudan o te abucheen.